miércoles, 16 de abril de 2014

La Aclaración... O Las Aclaraciones.

Alguna vez leí que a alguien le dijeron en el catecismo que la Santísima Trinidad eran tresquesonunaquesontrés. Pues de igual manera, las aclaraciones que hice desde el teléfono dispuesto ex-profeso dentro de la sucursal de mi preferencia del Banco Nacional, fueron dosquesonunaquesondós. Esto por el formalismo de que habían sido dos los cheques de los cuáles solicitaba la aclaración, pero que en realidad amparaban un solo monto, el monto total sustraído: Noventa y cinco mil trescientos setenta y cinco pesos.

Esto sucedió el 31 de Marzo del presente, mi primer día hábil en México. Yo había aterrizado la tarde anterior de un viaje que había durado 30 días. Esa mañana, no me costó trabajo despertar temprano (el cambio de horario se encargó de tenerme alerta desde las 4:30 AM) para estar listo y llegar puntual a la hora de apertura de la susodicha sucursal.

Y aquí, mi querido lector, me permito un breve paréntesis: ¿Ha Usted intentado realizar un trámite no relacionado con operaciones en caja o con apertura de cuentas en el Banco Nacional? Después de pasar ahí una ya significativa parte de mis recientes horas hábiles, me pregunto cómo es que los clientes de dicho banco no hemos metido quejas, enviado cartas, o simplemente, no nos hemos cambiado de banco. El descaro de tener sólo una o dos ventanillas de "Atención a Clientes" por sucursal, contra doce o quince ventanillas de cajeros, es comparable sólo a la incipiente y lánguida actitud resignada de los que nos llamamos sus clientes. Nadie se queja ante la colosal lentitud del servicio -planeada seguramente para disipar cualquier brío exacerbado de los clientes molestos-, en lugar de ello, nos sentamos como Penélope a esperar y a mirar indefinidamente el contador digital esperando el milagro prometido: "El momento en que ese 604 se convierta en mi 631".

Volviendo al relato, recordará Usted, solidario lector, que estando en China, se me informó que mi "Número Secreto" estaba bloqueado. Pues bien, el "Round Dos" de la llamada, aquella noche (día en México), culminó con que pude finalmente hablar con una amable representante y bloquear todo el resto de La Chequera; sin embargo, no pude levantar La Aclaración (o Las Aclaraciones) de los cheques robados, puesto que el sistema telefónico no le permite a los ejecutivos del banco acceder a ningún dato de la cuenta del cliente, si éste no inició una "Sesión Verificada" en el Audiómata. -Es por su seguridad, Señor.- culminó diciendo la amable mujer sin saber que esa frase me supo a chiste de viudas en un funeral. -Pero "no se preocupe"-, siguió amablemente, -tiene usted noventa días para levantar cualquier Aclaración (o Aclaraciones) al respecto de cualquier operación realizada en este banco. Termine tranquilo su viaje, y cuando esté de regreso, se presenta en su sucursal, des-bloquea su Número Secreto, y presenta La Aclaración (o Las Aclaraciones) que tenga que presentar. Lo puedo ayudar con algo más? No? Gracias por hablar a B*n*mex, lo atendió su servidora...-

Y fue tal y como me dijo: El día que regresé, pude en efecto des-bloquear mi "Número Secreto" en la ventanilla de "Atención a Clientes", para después proceder a una iluminada esquina de la sucursal a descolgar un teléfono de color crema y números semi-borrados que, sin necesidad de marcar lo enlaza a uno directo y sin escalas con el ya conocido Audiómata. Proporcioné correctamente mis datos, estrené mi des-bloqueado "Número Secreto" y finalmente logré iniciar una "Sesión Verificada" en el Audiómata. Sentí que mi problema estaba a punto de resolverse... Hasta que escuché el menú.

Creo que el periplo en el que estoy metido se puede sintetizar y comparar con encontrar en el menú del Audiómata la opción adecuada para el fin particular que uno quiere alcanzar. Concretamente, ese día, reportar cheques robados. Si la seguridad de decisión no es definitivamente una característica floreciente entre la comunidad de clientes de este banco (verbigracia la abnegación manifiesta ante el paupérrimo sistema de servicio al cliente en las sucursales), creo que el Audiómata está pensado a propósito para explotar la indecisión de quien lo usa... Pero no ahondemos en reflexiones vagas.

El camino fue fácil, pero largo: La sección de "reporte de robo o extravío" lo lleva a uno automáticamente a una sub-sección que asume que lo que se robó o se extravió es una tarjeta. La sección de "chequeras" no tiene una opción de "reporte por robo o extravío", y en primera instancia no hay ninguna opción para "hablar con un ejecutivo"... Por ello, mi primera llamada, según el contador digital del teléfono color crema fue de más de cuarenta minutos, en los que logré hablar con dos personas diferentes que me transfirieron a igual número de extensiones para que al final, en la espera de la tercera (y última), la llamada se cortara sin razón aparente. Colgar. Descolgar de nuevo. Repetir el proceso. Ahora sí entrar directamente por chequeras. Pedir con el ejecutivo. Mencionar el robo. Esperar la transferencia de llamada... Y finalmente llegar al punto ansiado: Hablar con la persona que me ayudaría a levantar La Aclaración (o Las Aclaraciones).

Así que, después de casi cuatro horas de estar en la sucursal de mi preferencia (era ya casi la una de la tarde), salí finalmente con una hoja en la que apunté lo siguiente: Dos folios de Aclaraciones, que en realidad eran la misma, pero con dos folios (como la Santísima Trinidad). Una lista de documentos que tenía que enviar. Una dirección de correo electrónico a la cual había que enviarlo todo y un conjunto de requisitos para escribir dos cartas de Aclaración, que tendría que imprimir, firmar y "escanear", para enviar junto con lo anterior. Se me dio una fecha máxima de resolución del 22 de Abril. Mi Aclaración (o Mis Aclaraciones) estaba puesta. Sólo había que esperar. Y esperé.

1 comentario:

  1. Leo tu periplo y recuerdo el mío con tanta rabia!!! Es indignante y además todavía tienen el descaro de decirte que es por tu seguridad!!! Sería más fácil hablar con el presidente Obama que hablar con un ejecutivo del Banco de México!!!!!!!!!!

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